En la Biblia hay dos descripciones de infierno. Una es la del fuego ardiendo. Muchas veces Jesús utilizó la palabra “Gehenna” para hablar del infierno. Gehenna era el basurero que estaba en las afueras de Jerusalén, y que siempre estaba ardiendo. También se habla del lago de fuego, que es un lugar reservado para Satanás y sus ángeles, o sea los demonios (Mateo 25: 41)
Dios desea que todos los seres humanos lleguen al cielo, que no se pierdan, pero los que rechazan la salvación de Jesucristo estarán por una eternidad compartiendo con Satanás y sus espíritus inmundos en ese lugar de tormento.
Hoy más que nunca, en este mundo en el cual vivimos, es sumamente necesario hablarles a todas las personas que Cristo Salva, que Él viene muy pronto y que tiene un lugar para nosotros preparado en el Cielo.
Reflexiona Sobre Esto
- ¿Cuántas personas usted conoce que aún no han aceptado a Jesucristo?
- ¿Qué piensa usted del cielo?
Lectura Del Día
Apocalipsis 20: 12-15